Imaginarios medievales acerca de los animales. Con especial mención a los imaginarios sobre perros y gatos en la Edad Media y el Renacimiento europeos Parte 1
Contenido principal del artículo
Resumen
En este texto voy a dedicar algunos comentarios a los imaginarios animales medievales y a sus representaciones, en general, pero mi interés se centra en los perros y gatos, cuyas representaciones muestran las distintas funciones y significados que para la mentalidad medieval tenían.
Es necesario entender que, para las gentes del medioevo, la naturaleza y lo sobrenatural estaban íntimamente conectados, que había infinitas correspondencias, y que los animales estaban cargados de significaciones mágico-místicas que los convertían, más allá de sus características y hábitos propios, en símbolos de otra cosa. El mundo visible y el invisible se juntaban, el cosmos y el microcosmos, dios y los seres humanos, la moral y la fe, estaban inextricablemente unidos y conformaban la cosmovisión medieval. Todo podía ser visto como un signo de otra cosa, y debía ser interpretado: el vuelo de un pájaro, un animal que se atravesaba en el camino, dependiendo de su color y actitud, podía significar la presencia de ángeles o demonios en el trayecto de la vida de cualquiera. Los imaginarios animales en la Edad Media, participaban de esa percepción de la realidad imbuida de significados trascendentes, y conducían a la necesidad de asignarles propiedades y atributos tanto negativos como positivos, muchas veces ambivalentes, e incluirlos en rituales de expiación y purificación.